lunes, 18 de febrero de 2013

It's not that easy

Little Miss Sunshine

Castillos


Mi madre fue a su pueblo y todo lo que trajo fue pan. Pan y recuerdos.

Ella viene de un apacible pueblito en las sierras de Puebla, imaginen: cerro atrás, adelante, a la derecha y a la izquierda; verdes pastizales, caminitos de piedra, fiestas con bailes, juegos y cohetes, caciques volubles, leyendas rurales e innumerables historias que ella o sus conocidos protagonizaron.

En algún lugar leí que, así como en Europa las historias medievales son más tangibles gracias a los castillos, en gran parte de América el realismo mágico se impone, pues la gran mayoría conoce o viene de un Macondo. Probablemente sea cierto.

Envidio a mi mamá, porque ella tiene historias que yo ni siquiera sueño. Llegué tarde, nací en el lugar equivocado, lo que sea. Me perdí de esa parte, y me odio por eso.

Las grandes historias no nacen donde yo me encuentro.

Frase del día


“Some people bring out the worst in you, others bring out the best, and then there are those remarkably rare, addictive ones who just bring out the most. Of everything. They make you feel so alive that you’d follow them straight into hell, just to keep getting your fix.” 

— Karen Marie Moning, libro a investigar

martes, 5 de febrero de 2013

Pobre Beezow-doo-doo-zopittybop-bop-bop


Empleos Peculiares I


D. y yo queríamos un empleo. En ese entonces teníamos 17, a lo mucho 18 años, y la perspectiva de ganar dinero a esa edad (y como estudiantes de tiempo completo) nos parecía tanto emocionante como inalcanzable.

Después de una o dos solicitudes sin respuesta (librería y kiosko, aún lo recuerdo) yo me di por vencida, pero D. no. Ella consiguió trabajo...nocturno...vendiendo ropa...a strippers. 

Hay empleos peculiares, y D. se sacó la medalla de oro con ese.

Su descripción del trabajo fue más o menos así:

"Mira, trabajo después de las 10 u 11 de la noche. Voy a lugares donde hay strippers y les hago la plática, luego intento convencerlas de comprar la ropa que mi jefa de da (...). Me recogen en mi casa y me regresan cuando acaba la jornada, gano dependiendo de lo que logre vender, puedo venir a la Uni en las mañanas, tengo las tardes libres y conozco un buen de lugares y personas interesantes (...). Además, la ropa que vendo está chidísima, un día te la enseño. Genial, ¿o no?"

Desconozco el salario y cuánto duró ahí, pero al día de hoy no puedo nombrar empleo más random.

Frase del día


Who honors those we love with the very life we live? Who sends monsters to kill us, and at the same time sings that we’ll never die? Who teaches us what’s real, and how to laugh at lies? Who decides why we live, and what we’ll die to defend? Who chains us, and who holds the key to set us free? It’s you. You have all the weapons you need. Now fight.

— De Sucker Punch