Día De La Candelaria

Lunes de weva, compren sus tamales, vayan a la iglesia o lo que sea que hagan en este día.

Quisiera contarles lo que escuché un día como éstos, hace unos dos o tres años, en misa. Se preguntarán ¿Qué demonios hacía yo ahí? Bueno, pues era joven y fácil manipulable, y si tu madre te promete llevarte a comer saliendo de misa, pues entonces vas porque vas, jeje, no, no se crean, la neta es que nunca había ido un dos de febrero a la iglesia, y quería ver que pex con todo eso.

Bueno, pues ahí estaba yo, hasta atrás de la iglesia, mientras todas las familias llevaban sus monitos vestidos a misa, en eso me puse a escuchar al padre, y la neta me dio mucha risa lo que escuché, fue algo así:

Sacerdote: Ayer vino una señora a verme, estaba muy preocupada porque su niño Dios se había caído y se había roto, y ahora no sabía que hacer. ¿Y saben que le dije que hiciera?
Todos callados
Yo: (pensando): Pues que compre un UHU y que lo pegue…
Sacerdote: Pues que agarrara un martillo, lo rompiera, lo hiciera polvo y que lo echara en una maceta.
Todos con cara de wtf?
Yo con cara de risa contenida
Sacerdote: ¿O es que estoy mal? A ver, ¿Cuántos de los presentes harían lo mismo?
Silencio.
Sacerdote: ¿Creen que los niños dios están vivos? ¿Los niños dios que traen el día de hoy tienen vida?
Todos menos yo: Siiiiii (muy efusivamente)
Sacerdote: (muy al estilo de adal ramones) Pues no es cierto!
Todos con cara de wtf? (de nuevo)
Sacerdote: Son solo representaciones, son figuras sin vida, sé que todos vienen el día de hoy para que los bendiga, pero…

A partir de aquí la misa siguió igual que siempre, recriminando a los fieles porque solo se aparecen en semana santa, en navidad, en año nuevo y en el día de la candelaria, así que hasta aquí dejo la historia.

Mi punto es…ejem…bueno, el día de hoy no hay reflexión, ni conclusión, ni crítica, sólo quería compartir con ustedes una de las misas más divertidas a las que asistí, por cierto que ese día casi muero aplastada por tanta señora que corrió hacia donde estaba el padre aventando agua bendita. Creo que fue una de las últimas veces que fui a misa, bueno ésa y la boda de mi hermano, pero no cuenta porque yo fungí como fotógrafa, aparte el padre llegó tarde y parecía que iba crudo, porque no se quitó sus lentes de sol durante el transcurso de la misa…pero esa es una historia para otro día.

Adiós, buena semana!