Un día leí que los mejores libros son aquéllos con los que el lector piensa: “yo lo pude haber escrito!”. El guardián entre el centeno de J.D. Salinger es uno de mis favoritos por esa sencilla razón.
Más allá de las controversias en las que se ha visto envuelto (si no saben cuales, investiguen), El guardián entre el centeno es un libro que relata la angustia adolescente y la búsqueda de identidad, todo esto en un contexto de sarcasmo, inteligencia y humor negro que el protagonista (Holden Caulfield) expresa hacia el resto de la sociedad.
No lo voy a negar, el lenguaje es sencillo y la historia es algo decadente, pero esto hace que de una u otra manera nos identifiquemos con Holden y sigamos la historia hasta el final.
Sinopsis de la librería Gandhi: “Publicada originalmente en 1945, la obra maestra de Salinger se convirtió inmediatamente en una obra de culto de toda una generación de lectores. La impresionante fuerza con que el adolescente protagonista se mira a sí mismo es de una brillantez sostenida como sólo muy pocos autores pueden lograr. Todo un clásico del Siglo XX.”
Lo mejor del libro, en mi opinión, es el protagonista, un chico que representa la angustia, la rebeldía, la incomprensión…en resumen, un adolescente como los hay en cualquier país y en cualquier época.
Más allá de las controversias en las que se ha visto envuelto (si no saben cuales, investiguen), El guardián entre el centeno es un libro que relata la angustia adolescente y la búsqueda de identidad, todo esto en un contexto de sarcasmo, inteligencia y humor negro que el protagonista (Holden Caulfield) expresa hacia el resto de la sociedad.
No lo voy a negar, el lenguaje es sencillo y la historia es algo decadente, pero esto hace que de una u otra manera nos identifiquemos con Holden y sigamos la historia hasta el final.
Sinopsis de la librería Gandhi: “Publicada originalmente en 1945, la obra maestra de Salinger se convirtió inmediatamente en una obra de culto de toda una generación de lectores. La impresionante fuerza con que el adolescente protagonista se mira a sí mismo es de una brillantez sostenida como sólo muy pocos autores pueden lograr. Todo un clásico del Siglo XX.”
Lo mejor del libro, en mi opinión, es el protagonista, un chico que representa la angustia, la rebeldía, la incomprensión…en resumen, un adolescente como los hay en cualquier país y en cualquier época.
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